Además del aura de misterio y excentricidad, que tiene por estar construida sobre una laguna, es de pequeñas dimensiones, por lo que podrás recorrer Venecia en 3 días perfectamente. Visitada por casi 30 millones de personas cada año, es el segundo destino con más afluencia de turismo de Italia y, recorrerla en vaporetto o a pie nos permite conocer la historia, los lugares imprescindibles, y las principales islas que la componen. Sin embargo, también podrás ver las artesanías y las bellezas naturales, de uno de los lugares más románticos de Italia y del mundo.
Cómo llegar a Venecia
Es muy fácil llegar hasta Venecia, por ser uno de los destinos más visitados de Europa. Las mejores opciones para llegar a Venecia son en avión, tren, autobús y coche.
Llegar a Venecia en avión y autobús
Venecia cuenta con dos aeropuertos cercanos, el Aeropuerto internacional Marco Polo Venecia, que recibe vuelos internacionales como: Madrid, Barcelona, París, o nacionales como: Roma, Palermo, Nápoles, etc. pudiéndote trasladar en autobús hasta Piazzale Roma, en taxi acuático con el “Alilaguna” o reservando este traslado privado hasta el hotel.
El segundo en importancia, es el Aeropuerto internacional Venecia Treviso, en el que mayormente, operan las principales compañías de vuelos low-cost y puedes trasladarte en autobús, transporte privado o en tren a la estación Mestre o la estación Santa Lucía.
Como veníamos de haber hecho la Ruta en coche de 10 días por Cerdeña, optamos por avión y nos dirigimos a Treviso. En el aeropuerto hay dos oficinas donde se pueden adquirir los pasajes para la estación Mestre o para ir a Piazzale Roma.
El precio del pasaje en autobús es de 10€ por cada trayecto de ida y de 19€ el de ida y vuelta. El tiempo que tarda en llegar a destino es de 45 minutos a Mestre y 55 minutos a Piazzale Roma.
Cuándo viajar a Venecia
En realidad, no hay mejores épocas para visitar Venecia, ya que cualquier época del año, independientemente del clima, es la mejor para estar en ella por lo menos una vez en la vida. En nuestro caso, visitamos Venecia en julio, pleno verano y disfrutamos de tres días de sol y sin lluvias.
Dónde alojarse en Venecia
Nosotros optamos por hacerlo en Mestre, y el alojamiento que elegimos y te recomendamos es el Staycity Aparthotels Venecia Mestre, ya que además de contar con todas las comodidades, tiene una ubicación cercana a la estación Mestre, es muchísimo más económico (pese a que viajamos en temporada alta) y se encuentra tan solo a 10 minutos en tren o autobús del corazón de Venecia.
No obstante, Venecia tiene una importante oferta en materia de alojamientos, ya que, es uno de los destinos turísticos más buscados del mundo, ¿Quién no soñó alguna vez con un paseo en góndola?. A continuación haremos una breve descripción de las mejores zonas y los lugares más buscados para alojarse:
- Mestre: alojamiento barato y cerca de todo.
- San Marcos: Tal vez la mejor zona para dormir en Venecia.
- San Polo: Ubicada en el corazón de Venecia, es elegante y distinguida.
- El Gran Canal: Frente a la vía de navegación más importante.
- Dorsoduro: El centro de la vida nocturna y la movida joven.
- Santa Croce: Estación Santa Lucía y Piazzale Roma.
Consejos para una mejor estadía en Venecia
Si bien 3 días no es mucho tiempo, es el suficiente para poder ver lo mejor de Venecia. Para optimizar tu desplazamiento, es importante que planifiques tus visitas con tiempo. Por ejemplo, sabiendo que las únicas vías que dispones para movilizarte son a pie y en vaporetto, es necesario contar con un pase que te permita utilizar los medios de transporte de manera ágil y con el menor costo posible.
Para ello, nosotros adquirimos en Get Your Guide el Venecia Pass, un pase que te permite abordar autobuses y vaporettos durante 24 ó 48 horas de manera ilimitada.
Su utilización es muy simple, pero debes respetar ciertos protocolos, ya que, si no lo haces te pueden multar con hasta 50 euros. Cada vez que debas utilizar algún transporte público, debes validar la tarjeta en las máquinas habilitadas para tal fin, que se hallan en las paradas de los autobuses y de los vaporettos. El proceso consiste en apoyar la tarjeta y el aparato te dirá que está validada.
Teniendo en cuenta que vas a caminar mucho (una excursión por Venecia equivale a una ruta de senderismo de varios kilómetros), debes tener siempre a mano zapatos cómodos, agua para beber, algo de comida para distraer el estómago y algún sombrero para protegerte del sol.
Día 1: Primeros pasos en Venecia
Abordamos el autobús en el aeropuerto para ir a Mestre y cuando llegamos a nuestro alojamiento, nos acomodamos, tratando de controlar la ansiedad para no precipitarnos a recorrer las calles de la isla.
Era ya la media tarde y como estábamos a metros de la estación tomamos el tren a Venecia, que sólo tardó diez minutos en llegar a la estación de destino.
Al descender, lo primero que vimos frente a la estación fue la Iglesia de San Simeon Piccol, una de las últimas iglesias que se construyeron en Venecia, y que fue terminada en 1738 por Giovanni Antonio Scalfarotto. En el interior podrás ver obras de arte del siglo XVIII, entre las que destacan pinturas de Giovanni Battista Piazzetta, Sebastiano Ricci, Giambattista Tiepolo y Giovanni Battista Pittoni. Además, por 2 €, (lo que cuesta una vela), podrás explorar una cripta que se halla debajo de la iglesia.
Paseo por las calles de Venecia
Después fuimos caminando un poco por las calles, bordeando los canales, cruzando algunos puentes y al final de la calle “Fondamenta Cannaregio”, vimos uno de los atardeceres más bellos y más venecianos que se pueden encontrar (nos recordó a los atardeceres de Oia en Santorini).
Hecho esto, fuimos a cenar a la Trattoria Al Poggio, donde nos atendieron muy bien y pedimos un menú del día.
El primer plato, como no puede ser de otra manera, en toda Italia, fue pastas para ambos: Spaghetti ai frutti di mare y Spaghetti alla bolognese.
El segundo plato elegimos uno de Petto di Pollo al Ferri y otro de Braciola di Maiale. Las porciones eran abundantes, tanto es así que también alcanzó para compartir con los niños. Además, degustamos el típico Aperol Spritz y nos regalaron una copa. En total pagamos 32,50€, un coste verdaderamente económico, con una cena al mejor estilo italiano.
Luego regresamos al hotel, dado que, si bien los autobuses circulan durante toda la noche, los trenes solo lo hacen hasta las 24:00 horas.
Día 2: Piazza San Marco, viaje en Vaporetto y paseo en Góndola
En el segundo día del Venecia en 3 días, decidimos visitar la Piazza San Marco y conocer sus alrededores. Iniciamos el periplo, abordando un vaporetto hasta la zona de la plaza y, como no podía ser de otra manera, fuimos a conocer la Basílica di San Marco. Fue construida entre los años 828 y 832, para albergar el cuerpo del Apóstol San Marco, patrono de la ciudad. Está ubicada junto al Palacio Ducal y pese a los diferentes estilos que le imprimió el tiempo está considerada una de las más bellas de Europa.
Caminata por la Plaza San Marco
Mientras recorríamos la plaza, pasamos por el Caffè Quadri y, por curiosidad, entramos a uno de los cafés más antiguos de Europa, ya que data de 1775, cuando fue fundado por Giorgio Quadri. Vale decir, que nuestra curiosidad nos costó 10 euros por persona (el costo de cada café), pero nos sentamos en la terraza que alguna vez fue ocupada por Marcel Proust, Alejandro Dumas, Lord Byron, Honoré de Balzac y Richard Wagner y más recientemente por Brad Pitt, Robert de Niro, Woody Allen, Robin Williams, Marcelo Mastroniani o Antony Quinn. Un gusto caro, pero… ¡quién nos quita lo bailado!
Paseo en Góndola
Después de haber explorado toda la Piazza San Marcos, decidimos realizar un paseo en góndola. Elegimos hacerlo contratando un gondolero que estuviera ubicado en los “canalitos” y no los del Gran Canal, por dos motivos: que estos últimos ingresan poco por las zonas internas y que los primeros, lo hacen por los canales secundarios, que son mucho más bonitos y además, también lo hacen por el Gran Canal, pasando por el puente de Rialto, el puente de los Suspiros, etc.
Los precios para hacer un paseo en góndola, rondan entre 50 y 70 euros (nosotros pagamos 60 euros y la tuvimos solo para nosotros). Es muy importante intentar negociar el precio por que siempre lo bajan. Por otra parte, si tienes suerte como nosotros, el gondolero te cuenta la historia de cada lugar por el que va pasando.
Fin de la excursión matinal
Hecho esto fuimos caminando al Puente de los Suspiros y tomamos un pequeño descanso, pero acompañada por una cerveza y cicchetti veneziani, un entremés típico de la zona, compuesto por distintos platillos. Vencidos por el cansancio, regresamos al hotel a reponer fuerzas.
Tarde y noche del segundo día
Después de una reparadora siesta, optamos por conocer algunos de los barrios de Venecia. Comenzamos por el Campo Santa Margherita, que se encuentra en el sestiere di Dorsoduro y es el lugar donde los estudiantes y grupos de amigos se reúnen para tomar un spritz a la hora del aperitivo. Allí nuestros niños juguetearon y corretearon durante un tiempo y luego emprendimos una larga caminata que terminó en el sestiere di Cannaregio, sobre la calle “Fondamenta Cannaregio”.
Aprovechamos para cenar en la Pizzeria Very Good, donde comimos 3 pizzas: 1 margarita, 1 buffala y 1 Veneciana. De las mejores pizzas que probamos, especialmente la Veneciana. Gastamos en total 31 euros, precio que pagamos por 3 pizzas, 2 cervezas y el coperto (1€). Luego, vuelta al hotel y a descansar, ya que el día siguiente sería largo y agitado.
Dia 3: Visita a Murano y Burano
Dos de las islas más bonitas de Italia forman parte de Venecia y se hallan a pocos kilómetros de la ciudad. Murano y Burano se caracterizan por su belleza y por las artesanías que en ellas se elaboran. Si bien puedes optar por visitar las islas realizando un tour, en este caso decidimos hacerlo por libre utilizando el vaporetto, para no sujetarnos a horarios, ya que íbamos con los niños.
Llegada a Murano
Para terminar nuestro Venecia en 3 días, desayunamos y luego nos dirigimos en autobús hasta el Gran Canal para abordar alguno de los vaporettos que diariamente salen hacia estos destinos. A media mañana tomamos uno de los que salen cerca del Puente de Rialto y en poco más de veinte minutos llegamos a Murano, pese a que el transporte hizo una parada intermedia.
Tras desembarcar iniciamos la caminata y después de un corto trecho arribamos a la Pizzería Marlin Ristorante, donde comimos frugalmente. Al finalizar, tomamos la calle Fondamenta dei Vetrai, que corre paralela al canal, y que es donde concentra una gran cantidad de talleres de vidrio artesanales, hasta llegar a la chiesa di San Pietro Mártire. Metros más, arribamos a la Veteria Mazzega donde ingresamos a la tienda para observar algunos de los famosos cristales de Murano, ya que esta vidriería es una de las más tradicionales de la isla. Volvimos al puerto y nos embarcamos rumbo a Burano en Vaporetto.
Llegada a Burano, una de las islas más bonitas de Italia
De más está decir, que es impresionante la vista a medida que nos acercábamos a la isla de, las casas multicolores, (a cuyas espaldas se recorta el “campanario inclinado” de la chiesa di San Martino Vescovo), son bellísimas. Descendimos del barco y comenzamos a caminar, sin rumbo y sin prisa por las calles de Burano y lo primero que encontramos en nuestro camino fue la iglesia que habíamos avistado desde el vaporetto (San Martino Vescovo).
Seguimos adelante y pasamos por el Museo del Encaje que se ubica frente a la plaza Galuppi, en el histórico edificio Podestà de Torcello. Allí se conservan los secretos del fascinante mundo del encaje, sus técnicas y sus puntos más utilizados (punto Venecia, Burano punto). Luego llegamos a la casa más famosa y fotografiada de Burano: la Casa di Bepi, que perteneció a Giuseppe Toselli, quién diariamente pintaba figuras geométricas en las paredes de su hogar. Durante el trayecto visitamos la Piazza Baldassarre Galuppi y cruzamos una infinidad de encajeras trabajando, creando bordados muy finos, y tiendas donde exhiben los productos elaborados.
Vuelta a Venecia y despedida
Nuestra idea era visitar la isla de Torcello, pero como ya era media tarde pensamos en emprender la vuelta a Venecia.
Al llegar, desembarcamos frente al Puente de Rialto, y tuvimos tiempo para degustar un helado de la afamada Gelatoteca Suso que se encuentra a pocos metros y sacarnos una de las tradicionales fotos frente al canal della Fava.
Antes de tomar el autobús para regresar al alojamiento, compramos algunas pizzas para comer algo antes de irnos a descansar, porque al día siguiente partíamos para hacer el itinerario de 3 días en Roma. Así transcurrió nuestra aventura por Venecia en 3 días, con la satisfacción de haber pasado una estancia placentera, en uno de los lugares más interesantes, bellos y exóticos de Europa.
Qué belle experiencia contada aquí de su viaje a Venecia, me encantó. Y también la foto familiar en la góndola.
¡Hola Sonia! Muchas gracias, la verdad que fue una experiencia inolvidable este viaje. Venecia es un destino al que ya estamos deseando volver.. Un saludo!