30 pueblos asturianos que ver en los Picos de Europa

El Parque Nacional de los Picos de Europa está dentro de la Cordillera Cantábrica y alberga pueblos maravillosos. Se extiende desde la estribación de los Pirineos, hasta el Macizo Galaico-leonés, con una longitud de 480 kilómetros. Las cumbres del Parque Nacional son formaciones calizas, con alturas que pueden superar los 2500 metros y que, en algunos puntos se sitúan a escasos 15 kilómetros del mar. Dentro del territorio asturiano, encontrarás cientos de aldeas, y poblados de una singular belleza, con una cultura ancestral, que dio origen a manufacturas de fama mundial, como los quesos como el Cabrales (que el libro Guinness de los Récords cataloga como el más caro del mundo) o el Gamonéu, ambos un tipo de queso azul con denominación de origen protegida.

Algunos, incluidos entre los pueblos más bonitos de Asturias, con vistas panorámicas, que hacen las delicias de los escaladores, y por los que transcurren rutas de peregrinación, atesoran una rica historia vinculada a la liberación de la Península Ibérica en la Edad Media. El Parque Nacional de los Picos de Europa, es el único del mundo, que dentro de su territorio tiene pueblos habitados y acoge un Real Sitio como el de Covadonga.

Los hemos ordenado de este a oeste, para que, si lo deseas, puedas organizar tu propia ruta. Ya sea con la totalidad de los pueblos, de manera alternada o por tramos de acuerdo a tus gustos, necesidades o cercanía (podrás hacerlo hacia una dirección o la inversa según donde residas). Dicho esto, vamos a conocer los 30 pueblos más bonitos de los Picos de Europa.

1. Merodio

Situada en el concejo de Peñamellera Baja, la villa de Merodio se ubica a 224 metros de altura. Actualmente cuenta con una población de aproximadamente 107 habitantes y, además de las bellezas naturales, de un interesante patrimonio histórico. Con bellas casas y soleados corredores con geranios multicolores, dispone de dos bares-tiendas, tan comunes antaño, con antiguas balanzas, anaqueles de madera y barras de mármol, en los que podrás comprar zapatos, pan o clavos. Destaca la iglesia parroquial “Iglesia historicista de Santa Leocadia de Merodiu” y su torre con pináculos, junto a la iglesia se encuentra el cementerio.

Tiene un par de casas señoriales de la familia García de Lago. Una de ellas, del siglo XIV, está blasonada con escudo de los Noriega, Colosía y Mier. La otra es de estilo indiano, con torre y palmeras y con los escudos pertenecientes al palacio de Mier. Además, cuenta con un impresionante jardín que se extiende hasta los Picos de Europa. Merodio, un bello rincón de Asturias en el límite con Cantabria que anticipa lo que veremos en nuestro derrotero por el Parque Nacional de los Picos de Europa.

2. El Mazo

El Mazu, es una localidad de la parroquia de Buelles, del concejo de Peñamellera Baja. Está situada a una altitud de 70m y en la actualidad cuenta con una población aproximada de 35 personas en 20 viviendas. Destaca la Cueva de la Loja, uno de los enclaves paleolíticos más importantes del concejo. Ubicada a 400 metros de la aldea, sobre la margen derecha del río Deva, tiene 102 metros de longitud y una entrada de 4 metros. A tan solo 2 metros de su comienzo, se halla el primer símbolo, que se cree pertenece al período Solutrense.

Después de recorrer 50 metros, arribamos a un panel con grabados de animales. Estos podrían representar uros (antecesores de las vacas) y lo que podría ser un lobo persiguiéndolas y un caballo. Se considera que tienen una antigüedad de entre 14500 a 15000 años. Sin embargo, solo pueden visitarla 35 personas por día, previa reserva telefónica o personalmente en la entrada de la cueva.

3. Alevia

Ubicado a los pies del Pico Piedrahita, en el lado sur de la ladera del Cuera, y a 350 metros de altitud, Alevia es una de las puertas de entrada al Parque Nacional de los Picos de Europa. Para llegar, debemos atravesar una carretera llena de curvas y contracurvas y disfrutar durante unos minutos de vistas maravillosas. Al llegar al pueblo, se puede aparcar en un parking gratuito, situado cerca de la ermita de San Antonio, construida en el siglo XVII. Con su torre exenta, su campanario y un reloj, desde allí pueden verse de un lado los pueblos linderos y los campos de maíz, y del otro el Pico de Peñamellera y los Picos de Europa.

Por sus intrincadas calles, callejuelas y caminos, nos encontraremos casas de piedra, que se alternan con edificaciones indianas. Además, impresionantes palacetes, casas restauradas a nuevo y casas abandonadas. Entre ellas destacan el edificio de la Quinta de Arriba, que data del siglo XV y punto de partida de excursiones de montaña como por ejemplo la del pico Paisanu. No podremos sustraernos al encanto de la plaza, a la amabilidad de los aldeanos y las increíbles vistas que nos depara. Realmente es una visita que no debes perderte.

4. Panes

Situado a orillas del Cares-Deva, Panes es la capital del concejo de Peñamellera Baja y su centro urbano y comercial. Es punto de partida de las excursiones y visitas a los Picos de Europa y cuenta con buenos servicios turísticos. Asimismo, a través de la Garganta de Hermida se accede al valle de La Liébana y, en temporada, es un importante centro de caza y pesca. En la margen derecha del río Deva dispone de un área recreativa y en las cercanías del Puente de Siejo se pueden obtener piezas de truchas o salmón.

La parte moderna de Panes se desarrolla a ambos lados de la carretera Tinamayor-Palencia, donde se erigen construcciones de principios del siglo XX de estilos tradicionales, montañeses y modernistas. En la parte antigua, edificios de los siglos XVI y XVII, como el excelente Palacio San Román, de estilo rural. La iglesia Iglesia Parroquial San Vicente Abad de Panes, reemplaza a la antigua, de románica que se hallaba en el cementerio parroquial y que fue destruida en 1936. Frente a la Plaza Nueva de Panes se encuentran las escuelas, la bolera y el Museo de Bolos de Asturias, ya que este deporte es tradicional entre los asturianos.

5. San Esteban de Cuñaba

San Esteban de Cuñaba es una pequeña aldea montañesa asturiana, que constituye una entrada natural al Parque Nacional de los Picos de Europa. La carretera para llegar a San Esteban de Cuñaba, tiene muchas curvas en herradura, y si bien es estrecha, tiene buen asfalto. Al ingresar, te recibirá una gran plaza con un milenario castaño, que fue derribado por una tormenta y al que los vecinos pusieron nuevamente de pie (y de pie sigue).

A 500 metros de la plaza un mirador que te brinda el impresionante panorama de los Picos de Europa. Más allá, un área recreativa, con una mesa, fuente y un haya espectacular, en un bosque con diferentes tonalidades de verdes y marrones y una densa arboleda que le confiere un carácter mágico. Elegido Pueblo Ejemplar de Asturias en 1990, es uno de los accesos a pie al Parque Nacional de los Picos de Europa menos transitado y punto de partida de varias rutas de senderismo.

En el valle del río San Esteban se encuentra la ermita del Santucu, de tipología medieval, en una zona de impresionante belleza. Las familias de San Esteban de Cuñaba tras la devastadora inundación en agosto de 1983, rehicieron el pueblo y crearon la Sociedad Agraria de Transformación, para producir, elaborar y comercializar de manera conjunta sus producciones. Un pueblo con una gran historia, con gente tenaz y emprendedora y una belleza natural impresionante.

6. Alles

Se ubica en el concejo de Peñamellera Alta, en el sorprendente Paisaje Protegido de la Sierra del Cuera. Con una población cercana a los 200 habitantes, en inmensas praderas, densos bosque y verdes montañas, Alles hace honor al lema turístico de Asturias de “Paraíso Natural”. Con hermosas construcciones de estilo indiano, es realmente un pueblo con encanto, dentro de un entorno natural y con el marco de los imponentes Picos de Europa.

Destaca la Iglesia barroca de San Pedro de 1787, fundada por Juan Mier y Villar, y que reemplazó a la vieja iglesia románica de San Pedro de Plecín. La iglesia cuenta con dos torres (una de ellas de aguja), la cúpula con corona, cinco retablos, y dos pórticos. También podrás ver las ruinas de la iglesia de San Pedro de Plecín que se hallan a 500 metros de la anterior, a la que se puede acceder atravesando el barrio de Llumberu, por un sendero cubierto de una espesa vegetación.

Asimismo, la torre de Lombero, un torreón defensivo de la época medieval, se halla en ruinas e invadida por la naturaleza, que lleva el nombre del barrio en el que se encuentra. A su lado la Capilla de Reina de los Ángeles, en la plaza donde también se halla el Centro de Salud. Por último, la Casona del Pedroso, que ostenta un escudo con la leyenda de la familia Mier.

7. Mier

Situada en el Parque Nacional de los Picos de Europa, Miér está dividida por dos barrios: Niserias y Mier. A la vez, el barrio de Mier se divide en otros dos, Miér d’Acá y Miér d’Allá. Ambos separados por el río Cares y unidos a través del puente México. Lo primero que verás a tu arribo, a orillas del río, será la preciosa capilla de la Virgen de las Nieves. Ubicada junto a La Lanjarera, en la que el Palacio de los Mier y el Molino forman un conjunto arquitectónico. Entre sus dos ventanas ostentan el escudo de los Mier cubierto por un Yelmo.

Las casas son mayormente de piedra caliza. También verás otros palacetes como “el Palación”, que tiene dos grandes entradas y una monumental escalera de piedra que lleva al primer piso, donde asoma un balcón. En el barrio Mier d’allá, puede apreciarse una bella construcción que se llama (no podía ser de otra manera), el Palacio de los Mier. Se trata de una casona que luce con orgullo el escudo nobiliario.

Además del puente que une los barrios, hay otro sobre el arroyo Boluga, conocido como puente del Molín y otro al final del pueblo, aguas arriba del Cares llamado Puente Lornia. Un pueblo emblemático donde reluce el poderío que la familia Mier tuvo en la región, extendiéndose a Cabuerniga, Cervera, Llanes, Ribadedeva, Santander y América, llegando a ser figuras claves en importantes acontecimientos históricos.

8. Trescares

Se estima que el origen del pueblo es de la época romana, y está formado por dos barrios, El Pontón y Trescares. Probablemente su nombre se deba a que allí se unen tres ríos: el río Cares, el río Jana y el río Rubó, o también, a que “tres” puede significar detrás (detrás del Cares). Construida en piedra caliza, destaca la iglesia de San Vicente de Trescares. Una iglesia de aproximadamente 170 metros cuadrados, con su tejado de madera, la cúpula roja, todo esto con tejas rojas de cerámica. Se encuentra en la parte alta del pueblo y fue construida a principios del siglo XX, en estilo rural asturiano. Asimismo la iglesia de San Fausto en desuso.

Otro de los innegables atractivos de Trescares es el puente de La Vidre, elemental para los lugareños. Fue construido en la Edad Media, posiblemente sobre los restos de un puente romano, ya que es de un arco, con las pilastras apoyados a ambos lados del río. Río arriba, muy cerca del pueblo, se halla la Cueva de Traúno, con pinturas rupestres. Protegida como Bien Cultural, se estudia su apertura al público. Los impresionantes paisajes naturales, las imponentes gargantas del río Cares y el marco de los Picos de Europa, hacen de Trescares un lugar único digno de ser visitado, por lo menos una vez en la vida.

9. Cáraves

Ubicado a una altitud de 340 metros, en el concejo de Peñamellera Alta, el pueblo de Cáraves se divide en dos barrios (Higares y La Voleta) y cuenta con una población de 22 personas. Se llega a través de una empinada carretera, en la que se ven colmenas de avispas asiáticas o velutinas. Desde el pueblo se puede tener una excelente vista del río Cares y de los Picos de Europa. Caminando por sus calles podrás ver la Iglesia de Santa María Magdalena de Cáraves, en el barrio de La Voleta. Una capilla con una estancia pequeña que funciona como sacristía y la Casa del Capellan.

Un poco más arriba, los restos de la iglesia de San Emeterio, que fue una importante edificación y se halla asociada a la capilla. Muy cerca, en dirección al río Cares, se encuentra el Cementerio Parroquial de Santa María Magdalena de Cáraves. En el agreste barrio de Higares, añosos árboles y viejas construcciones donde hibernan los lirones, le dan a la aldea el hermoso aspecto de estar integrada a la naturaleza.

10. Oceño

Oceño se ubica a 500 metros de altitud, cuenta con 52 habitantes en 22 viviendas y es el pueblo más alto del concejo de Peñamellera Alta. Además, se halla entre dos cadenas montañosas: la Sierra del Cuera y los Picos de Europa. Para llegar hay que atravesar una carretera sinuosa de 4 kilómetros de largo. En el trayecto se obtienen excelentes vistas del río Cares y las sierras adyacentes. A la entrada del pueblo hay un pequeño aparcamiento y las casas conservan el estilo tradicional, con estrechas callejuelas.

Está formado por los barrios de Mildón y Oceño. Destacan (como es característico en los pueblos de la zona) la iglesia de San Juan Bautista, cuya nave está cubierta en madera y la bóveda en cañón y una puerta gótica. Tiene un excelente estado de conservación y está flanqueada por dos jóvenes tejos. Sobre la clave del campanario que remataba la fachada (destruido durante la guerra civil) se conserva una inscripción del año 1787, y los días sábado más cercanos al 24 de junio de cada año se celebra la festividad del santo. Además de la iglesia sobresalen la Casa del Conceju, el parque infantil y la bolera. También se elabora el queso de Cabrales y, fundamentalmente, Oceño cuenta con las maravillosas vistas de los Picos de Europa.

11. Arangas de Cabrales

Es un pueblo del concejo de Cabrales, situado a 360 metros de altitud, con una población de más de 60 personas. A medida que te acercas a la aldea, además de la montaña, verás la iglesia. Antes de entrar al pueblo, un desvío a la izquierda te lleva a un espeso bosque, al que, al final se abre un bello prado donde majadas de animales pastan en la falda de la montaña. Detrás, la imponente mole de los Picos de Europa. Cuando arrecia la niebla, la combinación del bosque, el prado, las bestias pastando y las altas cumbres nevadas, crean un paisaje surrealista, digno de una novela del escritor asturiano de ciencia ficción Rodolfo Martínez.

¿Que más puedes ver en Arangas?

El núcleo original del pueblo de Arangas es el barrio Traslacasa, que conserva edificaciones del medievo y la Fuente de las Infantas, tan famosa que hasta tiene su propio poema. En el pueblo verás construcciones del tipo tradicional, un palacio y la iglesia gótica dedicada a San Pedro, que con el correr de los años sufrió múltiples transformaciones y que está custodiada por una “tejo” multi-centenario. Destaca el palacio de Navariego, del siglo XVII, que se erige en lo alto de la aldea y por supuesto, está blasonada con el escudo de los Mier y de los Cossío. También verás la Casona del Santón, una casa en ruinas dividida en dos, cada una con su puerta.

Por último, no puede obviarse las cuevas de Arangas. Tres cuevas (Cueva de los Canes, Cueva de Aranga y Tíu Llines) que estuvieron habitadas desde el paleolítico superior hasta la edad de bronce. En la Cueva de los Canes se hallaron grabados y tumbas del mesolítico de entre 5000 y 7000 años de antigüedad.

12. Las Arenas de Cabrales

Conocido como Las Arenas, se ubica a 150 metros de altura y es mundialmente conocido por ser el lugar de nacimiento del famoso queso de Cabrales. Tiene casi 900 habitantes, es el poblado con mayor cantidad de población del concejo y se reparte en varios barrios. Es un pueblo muy acogedor, con un entorno natural excepcional. Cuenta con una excelente arquitectura, una gran oferta gastronómica-hotelera, un ambiente saludable de montaña y es paso obligado para internarse en Los Picos de Europa. Si deseas hacer base para explorar la zona de media montaña del resto del municipio, puedes alojarte en el Hotel La Casa de Juansabeli.

Vagando por sus calles, se pueden apreciar las casas de piedra, con tejas árabes, corredores de madera, ventanas y portones. La capilla funeraria de San Juan, que data de la Edad Media y se halla en medio de una necrópolis. Detrás de la capilla, llama la atención el Palacio Mestas y Cossio, de principios del siglo XVIII, en estilo barroco–renacentista, con una torre a su lado. Podrás ver la Casa de la Papera, que perteneció a la familia más encumbrada del pueblo y detrás de la misma la primera fuente del poblado.

Para obtener excelentes vistas podrás conocer el Barrio de Ríu, que fue el asentamiento original del pueblo y la iglesia de Santa María de Llas. Otros sitios de interés son la Cueva de la Covaciella, con pinturas rupestres y la Cueva-Exposición de Cabrales, donde mediante visitas guiadas se relata el presente y el pasado del queso de Cabrales.

13. Tielve

Este es otro de los pueblos más bonitos del Parque Nacional de los Picos de Europa, y está ubicado a 690 metros de altura. A orilla del río Duje y con una población de 72 habitantes, Tielve ha sido opacado por los pueblos que la rodean. Es el punto de partida de excelentes rutas de senderismo, que te permitirán disfrutar de bellos paisajes y tener vistas panorámicas impresionantes. Su economía se basa en la ganadería, en la fabricación de los quesos de Cabrales y en el turismo, dado que dispone de una abundante oferta hotelera. Antes de llegar al pueblo, a la derecha encontrarás el Puente Romano, que cruza el río Duje y un antiguo molino, que fueron declarados Conjunto Etnográfico.

Lo primero que verás al ingresar a este tranquilo y pequeño pueblo de los Picos de Europa, con casas de piedra y la belleza natural que lo circunda, es un magnífico tejo, luego la plaza y la Iglesia de San Cristóbal que data de 1385. A pocos metros, el lavadero, la bolera, la escuela de primeras letras de 1789 y, pese a los pocos habitantes del pueblo, en Tielve hay 7 queserías. En materia gastronómica, además del queso, se pueden paladear embutidos, carnes cocidas y guisos tradicionales. Ideal para disfrutar de unos días de descanso en cualquiera de los hoteles o casas rurales del pueblo. Sin embargo, también para realizar rutas de senderismo o de alta montaña por el entorno de los Picos de Europa

14. Sotres

Ubicado a 1050 metros de altitud, es el pueblo más alto de Asturias. En un valle rodeado de imponentes montañas, viven 114 personas en una extraña mezcla de campesinos, emprendedores, ganaderos y montañeros, que hace a Sostres una aldea única. El pueblo cuenta con un albergue, varios hoteles, restaurantes, guías de montaña y tiendas de productos artesanales. En especial embutidos y carnes y por supuesto, uno de los quesos más emblemáticos de Asturias: el famoso queso de Cabrales. En el núcleo del pueblo, muchas casas conservan la arquitectura tradicional de montaña, pero con todas las comodidades que exige la vida moderna.

Cuenta con un parking para casi 200 coches a escasos metros de la plaza de Sotres. También, un área recreativa y la iglesia de San Pedro, que fue construida en 1759 sobre una antigua capilla. Perfecto para que excursionistas y montañeros fijen su base, para iniciar rutas y escaladas, ya que, dispone de una gran oferta de deportes al aire libre y senderismo. Algunos de ellos son: ascender al lago Moñetas, visitar las cuevas para maduración del “quesu Cabrales” o recorrer alguna de las muchas rutas de montaña del Macizo Central de los Picos de Europa, por ejemplo, al famoso Naranjo de Bulnes. Para ello, lo mejor es dejar que los paisanos te aconsejen, ya que ellos pueden indicarte las mejores sendas, porque son conocedores de la zona.

15. Bulnes, de los pueblos más bonitos de los Picos de Europa

Situado a 649 metros de altitud, Bulnes tiene una población de casi 50 habitantes y se halla dividido en dos barrios: Bulnes de Arriba o el Castillo, el más antiguo con pocas edificaciones y los restos de una torre (de allí el nombre “el castillo”) y Bulnes de Abajo, más moderno y con la mayoría de los edificios de servicios. No tiene acceso vehicular, siendo el único pueblo de Asturias sin coches.

Solo hay dos maneras para acceder al pueblo: a pie o por medio de un funicular.
A pie, por un sendero por la Canal del Tejo, debiendo remontar un desnivel de 400 metros. Por funicular, atravesando la Peña Main, a través de un túnel de 2227 metros, que comenzó a funcionar en el año 2001. Hasta ese entonces solo podía hacerse caminando, lo que permitió que la aldea pudiese conservar su carácter rural.

¿Que encontrarás en Bulnes?

Situado en las entrañas de Los Picos de Europa y, pese a su reducido tamaño, cuenta con algunos bares y restaurantes. Asimismo, tiene una abundante oferta de alojamientos, destacando las casas rurales La Aldea de Bulnes y El Caprichu de Bulnes. El recorrido por el pueblo es encantador, ya que, entre las callejuelas, algunas  empedradas y otras de tierra, podrás ver hermosas casas de piedra caliza con tejas rojas, con terrazas de ensueño que dan al río o que se hallan bajo la reparadora sombra de los árboles.

Desde Bulnes de Abajo, después de realizar un ascenso de 10 minutos, arribarás al Mirador de Bulnes, donde al atardecer, en días soleados, sobre la pared occidental del Pico Urriellu, el reflejo de los rayos de sol adquieren un tono color naranja (de allí el nombre Naranjo de Bulnes), ofreciendo una vista realmente fascinante. Otras actividades que podrás desarrollar en Bulnes son: senderismo, paseos a caballo, espeleología, cicloturismo, etcétera. Para más información sobre este pueblo, puedes leer nuestra guía para visitar Bulnes.

16. Poo de Cabrales

Poo de Cabrales, se ubica en la margen derecha del río Casaño, a 158 metros sobre el nivel del mar, cuenta con una población de más 200 habitantes y es puerta de entrada a los Picos de Europa. Es un pueblo antiguo y rústico, al que se accede cruzando el llamado Puente Romano, construido a principios del siglo XI y reconstruido en el medievo. Conservado en perfectas condiciones y permite el paso de vehículos, aunque éstos no pueden circular por el interior del pueblo. Al ingresar al pueblo, sobre mano izquierda, la iglesia parroquial Santa María Magdalena, construida en 1679 en forma de prisma y que está flanqueado por un viejo “texo” de más de 2 metros de diámetro en muy mal estado.

En el pueblo, se pueden apreciar varias casas blasonadas y en especial, llama la atención el Palacio de los Pérez Bulnes (hoy palacio de los Cernuda) del siglo XVII, que luce en su fachada el escudo de armas familiar y se compone de casa, capilla dividida en dos por un arco y muro exterior. Las calles de la aldea tienen curiosos nombres, como ser: calle de la alegría, calle del olvido, etc.

En las afueras del pueblo, hay un área de recreo con mesa donde se puede aparcar el coche y acceder al mirador del Pozo de la Oración, desde donde se aprecia en un primer plano la verde llanura y detrás el impresionante Naranjo de Bulnes (Picu Urriellu). En las cercanías podrás disfrutar de actividades como canoas, rafting, barranquismo, senderismo, escalada, espeleología, pesca y otros quehaceres.

17. Carreña

Es la capital del concejo de Cabrales, se encuentra a unos 200 metros sobre el nivel del mar y cuenta con más de 300 habitantes. Entre los principales barrios de Carreña se encuentran: del Quintanal, La Llosa, el Pamentar, la Bolera o La Llana. Algunos de sus edificios más emblemáticos son La Iglesia de San Andrés, construida en el siglo XIX, tras la destrucción en el siglo XVII de la iglesia de San Andrés de Porres. Tiene adosada una capilla, donde descansan los restos de algunos de los miembros de la familia Bárcena, antiguos propietarios de la finca. Se halla en el barrio del Quintanal y sobre la puerta tiene el escudo de la familia.

También se encuentra el Centro de Interpretación en Cabrales, ubicado en la Casa Bárcena, que se encontraba parcialmente arruinada, y que fue rehabilitada de manera integral, en la que, desde hace algunos años se halla una réplica de las cuevas de La Covaciella, (declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO) y El Bosque, referidos al Arte Rupestre Paleolítico. Otra visita imprescindible es la Capilla de Nuestra Señora de la Salud, construida por Francisco Bueno Bárcena, cuando sanó de la viruela por medio de sus súplicas a la Virgen.

Por último, el Puente Antiguo o Puente Conceyu, que se ubica sobre el río La Ría, que atraviesa Carreña. Tiene un solo arco, alto y bien conservado. Sobre él pasaba el Camino Real, que desde Peñamellera se dirigía a Onís por el valle del Casaño y unía el oriente con la zona central de Asturias.

18. Asiego

Asiegu es una aldea se ubica entre la Sierra del Cuera y los Picos de Europa y en el 2019 fue galardonado como Pueblo Ejemplar de Asturias. La aldea tiene 21 barrios, siendo la Caleya el más antiguo, ya que data de la época medieval, tiene muchas casas tradicionales asturianas, y en algunas de ellas el tiempo parece haberse detenido por completo. Es como viajar cien años atrás en pocos metros. La Casa del Cuetu de las Abellotas, es una de las más antiguas de esta aldea está ubicada justo encima del histórico barrio.

La iglesia parroquial de San Miguel de Asiegu encierra en su interior pinturas y murales, que hoy constituyen sin duda uno de los grandes atractivos de Asiegu, en un paseo cultural. Cerca del pueblo está situada La majada de Tebrandi, que consta de varias cabañas en buen estado, y una fuente. Allí también se encuentra una peña conocida por su forma como «La Señora”. En lo más alto de la aldea, se halla el área arqueológica del Taranu, con piezas de la Edad del Bronce (como 14 hachas de esta época prehistórica), y los restos de un castillo. Además, la puesta de sol en el Taranu es de indescriptible belleza.

¿Que más se puede ver en Asiego?

El famoso mirador “Pedro Udaondo” es un lugar único para observar y disfrutar el Picu Urriellu, un prodigio en vistas panorámicas. La Venida de les Vaques, es un camino que circunda la aldea. Concretamente es el de Las Prunales, en el barrio de La Pandiella, que se ha convertido en un paso único en el mundo, ya que es un mirador, con una barandilla en la que se recorta la silueta de veintiún vacas.

La Ruta´l quesu y la sidra, consiste en la visita a una quesería, a una cueva donde madura el queso Cabrales, a un llagar donde se elabora la sidra y la experiencia gastronómica con la que se remata la ruta. Una de las mejores maneras de conocer la Asturias rural, su pasado y su presente. Por los alrededores del pueblo, en lugares estratégicos, donde las vistas y el escenario son de gran belleza, hay 21 bancos apadrinados por los habitantes, para apoyar a la aldea.

19. Berodia de Cabrales

Se trata de una pequeña población, situada entre el río Casaño y el río Mirón a la entrada de los Picos de Europa. A una altitud de 400 metros, con una población aproximada de 64 personas y 48 viviendas. El principal atractivo de Berodia, es la proximidad al Parque Nacional de los Picos de Europa, su exuberante naturaleza y sus senderos que le permiten realizar todo tipo de rutas, así como escalada y espeleología. Esta tranquila aldea asturiana le brinda a los visitantes descanso en sus vacaciones. A su vez también permite poder participar del turismo activo que ofrece la zona.

Para ingresar al pueblo debemos cruzar el río Casaño en la intersección de la AS-114 y la CA-2, y después de recorrer cerca de 2 kilómetros llegarás al mirador de las Cuevas que ofrece unas maravillosas vistas de la Cueva del Bosque, el Abrigo del Golondrón y la Caverna de Covaciella. Siguiendo por la carretera, en un desvío a la izquierda, llegarás a la Parroquia de Santa María Magdalena de Berodia (Antigua Parroquia De La Virgen Del Rosario). De gran altura con una cruz latina y ubicada detrás de un tejo centenario.

Si continúas por este camino encontrarás un palacio del siglo XVIII de tres pisos, con un techo a cuatro aguas y en el piso alto, entre dos ventanas el escudo heráldico de los Inguanzo. Se trata del Palacio de Díaz Inguanzo, más conocido como la Torre, que entre sus lujos alberga un lagar de sidra con una prensa antigua.

20. Puertas de Cabrales

La aldea de Puertas se encuentra a 360 metros sobre el nivel del mar, cuenta con una población estable de poco más de 50 personas, que se ve incrementada a más de 300, por no residentes que tienen su casa de verano. Está rodeado de los montes del Collanáu, El Cuetu la corona y El Picu L’Cantu, en un valle cerrado y los imponentes Picos de Europa le dan marco a la belleza natural del lugar. Se divide en diez barrios, a saber: La Braña, Caparín, Vega, La Plaza, Paruga-La Castañar, Bártalo, El Campu, El Caleyón, El Pedregal, Los Muraos y Cuetu.

Para llegar, hay que tomar un desvío de la carretera AS-114 a la altura del puente Golondrón y avanzar por el camino que va paralelo al arroyo de Taraguín. La economía es agrícola-ganadera, tiene dos lagares de sidra y produce queso de Cabrales. Abundan los edificios antiguos y se pueden ver los restos de la iglesia de Santa Eulalia en las afueras de la aldea, junto a un hórreo, también antiguo de estilo Villaviciosa. La iglesia de Nuestra Señora de las Nieves, contiene algunos restos de la iglesia antigua y es de mediados del siglo XX.

Las fiestas son el 5 de agosto de cada año, con una concurrencia masiva de visitantes. Durante la segunda y tercera semana de agosto, los vecinos organizan un festival de cine de autor, (el Film-Fest) que también congrega una gran cantidad de público. Si quieres gozar de tranquilidad, Puertas es ideal, ya que es un lugar poco visitado y cuenta con un hotel rural en el barrio de La Plaza y una casa aldea.

21. Pandiello

A tiro de piedra de Puertas, situado a 510 metros de altura, Pandiello tiene una población de 47 habitantes. Rodeado de espectaculares montañas, en el centro de los Picos de Europa, es un punto de partida para realizar excursiones por el Paisaje Protegido de la Sierra del Cuera, la calzada romana del Monte Caoru o la ruta del río Cares. El pueblo cuenta con estrechas callejuelas, flanqueadas por antiguas casonas y casas en estilo tradicional. Además, con corredores de madera, largas galerías y la Iglesia de Santo Tomás de Pandiellu, infaltable en las aldeas cabraliegas.

En el pueblo se oye el sonido de los cencerros de las cabras y de las vacas que pastan en los verdes prados de los alrededores, que serán las que proveerán la materia prima para elaborar los famosos quesos de Cabrales. También destaca por su gastronomía, con platos típicos como el pantruque, que se prepara con harina de maíz, huevo, perejil, ajo pimentón y tocino. También la moscancia, una especie de morcilla fresca elaborada con poca sangre y que se diferencia de la típica morcilla asturiana, ya que, se le añade sebo de ternera o bien de cordero, que le da un sabor especial.

Pandiello es poseedora de una estratégica posición geográfica, ya que, está a 15 kilómetros del, Parque Nacional de los Picos de Europa y a aproximadamente unos 20 kilómetros algunas de las mejores playas asturianas como Torimbia o Gulpiyuri.

22. Canales de Cabrales

El pueblo Canales está situado a una altitud de 440m. En la actualidad cuenta con una población aproximada de 70 personas y 34 viviendas. Además, este pueblo ubicado en los Picos de Europa y a pocos kilómetros de la singular Costa Verde, repleta de calas y rincones mágicos. La aldea se ubica sobre la AS-114 y a su entrada existe un pequeño aparcamiento. La economía del lugar se basa en la explotación agrícola-ganadera, basada especialmente en la cría de ganado vacuno, ovino y cabrío. Todo ello necesario para la provisión de leche, que se emplea en la elaboración del famoso queso de Cabrales.

Asimismo, se ha impulsado fuertemente el turismo, por estar en el corazón de los Picos de Europa y por las actividades que pueden desarrollarse. Algunas de ellas son: el descenso en Canoas, paseos en caballos, rutas de quads, senderismo, escalada, espeleología, etcétera. Además, dispone de buena oferta hotelera y casas rurales. También vale detenerse en el Mirador del Alto de las Estazadas en el desfiladero del río Casaño. Un sitio donde es importante la pesca de trucha, en uno de los ríos más cristalinos y limpios de Asturias, que cuenta además, con extensos robledales y centenarios bosques de castaños. Para los amantes del senderismo, la Ruta Canales – Mina Delfina – Cueva de Alda, es una ruta de dificultad media, con un recorrido de 6,75 kilómetros, de tipo circular.

23. Ortiguero

Ortiguero es una localidad del concejo de Cabrales que está a una altitud de 480m, cuenta con una población de 87 personas, y está rodeado un espectacular paisaje montañoso. Su economía, por su topografía y sus pastizales, se basa en la ganadería. La leche de sus animales es de excelente calidad, con la que se elabora el queso de Cabrales, reconocido internacionalmente, considerado “el más caro del mundo” (en el Libro Guinness de los récords). Es un queso artesanal de pasta azul, que se elabora con leche de oveja, cabra y vaca.

Las construcciones se alternan entre antiguas y más modernas, destacándose las siguientes: La Capilla de San Julián, del siglo XII, con pinturas que son parte del patrimonio cultural del consejo. Es una capilla rural de 1686 donde se mezclan estilos románicos, renacentistas y modernos. De pequeñas dimensiones, planta rectangular, de dos tramos, separados por un arco de medio punto. Presenta un campanario lateral de medio arco rematado con cruz.

En su cercanía, se halla La cueva de Alda una de las cuevas más famosas, que tiene 2 salas muy amplias y dimensiones espectaculares, con estalactitas, estalagmitas, banderas y coladas, apta para ser visitada por familias con niños. La mina «Delfina» es un clásico de la mineralogía asturiana por los ejemplares de tirolita (un mineral raro), que se conservan en numerosas colecciones, además de extraños arseniatos de cobre.

24. La Robellada

Ubicada en el concejo de Onís, tiene una profusa historia. Su vecino Cangas de Onís, alguna vez fue parte del mismo, por lo que es evidente que los dos consejos alguna vez fueron uno solo. La Robellada se sitúa en las inmediaciones de la carretera AS-114, a 300 metros de altitud, en el denominado macizo del Cornión, pleno corazón de los Picos de Europa.

La Robellada es ideal para unas vacaciones relajadas, también ofrece numerosas posibilidades a los que deseen un turismo activo. Entre ellas: rutas, senderos, excursiones, deportes de aventura en montañas, valle, ríos y hasta playas, ya que se encuentra entre las más altas elevaciones del Principado y la costa del mar Cantábrico.

Su núcleo urbano, tiene construcciones de la arquitectura tradicional. Sin embargo, también numerosos hórreos y paneras bien conservados y un destacado patrimonio histórico-artístico, manteniendo numerosas tradiciones, costumbres y la riqueza gastronómica de la región. Por supuesto, que también se elabora el famoso queso Gamoneu, dado que cuenta con acreditadas queserías. Con sellos propios, y con una producción que va desde la crianza y ordeño de su propio ganado hasta la venta de los productos ya elaborados.

25. Benia de Onís

Asentada en el valle del río Güeña, es la capital del concejo de Onís, y el núcleo más poblado del mismo. Está ubicada sobre la AS-114, a 195 metros de altitud y cuenta con más de 300 habitantes. Además, es sede del Consorcio para el Desarrollo Rural del Oriente de Asturias, El Centro de Interpretación de la Fauna Glacial y de la Denominación de Origen Protegida del Quesu Gamoneu. Cuenta con un gran movimiento, varios hoteles y posadas, distintos restaurantes, bares y cafeterías. Quizás la razón es que Benia de Onís se halla muy cerca del Santuario de Covadonga.

Es la ventana al Parque Nacional de los Picos de Europa y esta enmarcado por un precioso entorno entre montañas y río y con un clima favorecedor. En su núcleo urbano, se puede disfrutar de la arquitectura popular, que mantiene varias casonas antiguas (como la Casona de Los Valles, del siglo XVIII, con amplio corredor de balaustrada de madera, escudos, jardín con palmeras), o la iglesia de Santa Eulalia de Onís, erigida en la margen izquierda del río Güeña.

Otros centros religiosos son: la ermita de San Roque, que es una sencilla capilla del XVII, bien conservada y cercana a la carretera AS-114 y la ermita de Nuestra Señora del Castro ubicada a poca distancia del pueblo. Todos los años, a fines de octubre, se realiza el certamen del Queso de Gamonéu. En el, se llevan a cabo concursos-exposición de Pita asturiana y de oveya xalda, campeonatos de música, de bolos y diversas actividades al aire libre. A la entrada del pueblo sobre la carretera, está la Oficina de Turismo de Onís, donde podrás recabar toda la información del concejo.

26. Gamonedo de Cangas – Gamonedo de Onís

Estos dos pueblos gemelos, separados por 1200 metros, pertenecen a dos concejos diferentes: uno al concejo Cangas de Onís y el otro al concejo de Onís. Ambos son famosos por la elaboración del queso Gamonéu, un tipo de queso azul con denominación de origen protegida. Además, los dos pueblos cuentan con alojamientos, bares y restaurantes. Ubicados muy cerca de los lagos de Covadonga, en pleno Parque Nacional de los Picos de Europa, los pastores antiguamente, maduraban el queso en cabañas. Ese queso no desarrollaba el hongo y era seco, entonces se dieron cuenta de que necesitaban colocarlo en una cueva para mantener la humedad que necesitaba.

Gamonéu de Cangues

El pueblo de Gamonedo de Cangas pertenece al concejo de Cangas de Onís y se encuentra sobre el valle del río Argañéu. Está dividido en barrios y destaca la iglesia de Santa María Magdalena, que conserva pinturas. Se llega por una carretera local que parte de Llano de Con y pasa por Gamonedo de Onís. Es el núcleo de población más alto del concejo de Cangas de Onís, un enclave turístico que atrae a los viajeros que buscan disfrutar de la naturaleza y de las actividades que podemos encontrar en ella.

Se puede desarrollar senderismo en las numerosas rutas de montaña, gozando de excelentes vistas, dentro de un ambiente rural enmarcado por una naturaleza incomparable. En julio durante dos días, se celebra la fiesta de la Magdalena, donde hay música de gaitas y tambores, verbena, y mucha sidra.

Gamonéu de Onís

Es gemelo de Gamonedo de Cangas y tiene entre su patrimonio a la capilla de Santa Marina, donde se halló una lápida romana, que actualmente se conserva en el Museo Arqueológico de Asturias. En Gamonedo de Onís, al igual que en su aldea hermana se lleva a cabo la fiesta de Santa Marina. Cambia el nombre, pero es el mismo festejo.

27. Soto de Cangas

A mitad de camino de Cangas de Onís y Covadonga, entre el río Güeña y el rio Reinazo, el pueblo de Soto de Cangas se ubica a 90 metros sobre el nivel del mar y tiene 170 habitantes aproximadamente. Dispone de una buena oferta de alojamientos, establecimientos gastronómicos y un camping. Entre las actividades que se pueden desarrollar están: rutas a caballo, pesca fluvial, piragüismo, descenso por el río Sella (11,1 kilómetros) y senderismo por las numerosas rutas de los Picos de Europa, (unos 12 kilómetros).

Soto de Cangas cuenta con un interesante patrimonio arquitectónico, como los palacios de Cambre y de los González Cutre, el torreón de la Jura y la iglesia de San Andrés Apóstol, entre otros. La iglesia es del siglo XVI, construida en piedra, cuyo frente consiste en un gran pórtico, apoyado en cuatro columnas y cubierto con tejas. La puerta principal es de arco de medio punto y por sobre ella una cruz. Por encima, una espadaña de dos arcos, con una campana cada una.

¿Que más se puede hacer en Soto de Cangas?

Frente a la capilla, se encuentra el Palacio de los Soto, que luego se llamaría de los González-Cutre. A unos 200 metros, La Casa o Palacio de Cambre, un conjunto de edificaciones, formado por tres cuerpos. El central, más elevado que seguramente fue una casa-torre, al oeste de este uno de doble plata (ambos del siglo XVI y al este el más antiguo, probablemente del siglo XIV). Además, el conjunto también tiene un viejo puente, un molino y la capilla Encarnación de la Virgen hoy inexistente.

En el Campo de la Jura, (donde dice la tradición que fue proclamado rey Don Pelayo), que se halla en la unión de las carreteras de Covadonga y Cabrales, podrás ver el Torreón de Soto o de la Jura, que consta de una vieja vivienda con un arco de medio punto y una saetera, un lugar histórico pero olvidado.

28. Covadonga

Covadonga se ubica a 257 metros de altitud y es uno de los lugares más bonitos que ver en Asturias. Allí, el 22 de julio de 1918, se creó el Parque Nacional de la Montaña de Covadonga (primer parque nacional de España), al cumplirse 1200 años de la batalla de Covadonga (origen del nacimiento de España). En 1995, se convirtió en el Parque Nacional de los Picos de Europa. A la entrada del pueblo se hallan tres grandes aparcamientos y el pueblo posee abundante oferta de alojamientos, asimismo, dispone de bares, restaurantes y tiendas. A la salida de los parkings, verás La Campanona, una gigantesca campana de tres metros de altura y 4000 kilos de peso.

Siguiendo por el camino llegarás a La Basílica de Santa María la Real de Covadonga, erigida donde estaba el antiguo templo en la Santa Cueva. Data de 1877 y se ubica en una enorme terraza, tiene tres arcadas, entre dos torretas en forma de agujas. En la explanada de la basílica se encuentra el Monumento a Don Pelayo, realizado por el escultor Eduardo Zaragoza en 1964. Dentro de la Santa Cueva, se halla una talla de La Virgen de Covadonga (la Santina), virgen que, según la leyenda propició el triunfo sobre los árabes al producir un desprendimiento que terminó con los enemigos. Asimismo, se encuentra la tumba de los reyes Don Pelayo y Alfonso I.

¿Que más se puede ver en Covadonga?

Justo detrás de la basílica, el Museo de Covadonga conserva obras de inestimable valor, como: un Cristo de marfil del siglo XVI y la corona de la Virgen de Covadonga y el Niño. A la derecha de la Basílica, verás una casa de dos cuerpos, con el escudo de Covadonga y la cruz de roble de Pelayo en su frente. Es la Casa Pitular, que alberga el Museo del Tesoro de la Santina y los Archivos del Cabildo.

Frente a la basílica está el Parque del Príncipe, (un desconocido pero hermoso parque), que ostenta la escultura de dos leones y, debajo de ellos, puentes de madera y una frondosa vegetación, que realzan la belleza del lugar. Por último, es dable destacar que en las cercanías se puede disfrutar del Mirador de los Canónigos y si continúas por la CO-4, pasarás por el Mirador de la Reina. Más adelante, arribarás a los bellos y famosos “Lagos de Covadonga”.

29. Caño de Cangas

Ubicada a 2,5 kilómetros de Cangas de Onís, el pueblo Caño de Cangas se halla a 70 metros de altitud, a la vera del río Sella, y esta atravesado por la carretera N-625. Situado en las puertas de los Picos de Europa, entre las actividades que pueden desarrollarse se cuentan: carreras de montaña, camping, aventuras, ornitológico, rural, ecoturismo, etc.

Conserva buenos edificios antiguos, como asimismo, los típicos hórreos y paneras de la zona. Destacan la Capilla de la Virgen de la Salud, de estilo barroco al que se accede por un pórtico con arco de medio punto, coronado con una espadaña de un ojo. A su lado, un tejo que ha fagocitado una polea que alguien dejo junto a él. A su lado, La Casa de Vega Celis, una casona de tipo rural de los siglos XVII-XVIII, con un hermoso corredor de madera tallada y algunos elementos de tradición popular.

En las cercanías se encuentra La Salmonera. Un coto de pesca de salmones en el Sella, (algunos investigadores sostienen que el salmón asturiano es el más antiguo de Europa). Se sitúa en una histórica presa de 1928, construida para facilitar la remontada de los salmones del Sella mediante un sistema de escaleras y pozas artificiales en el cauce del río. Unas planchas de hormigón permiten adentrarse en el salto de la represa para ver, con la debida precaución, a los salmones remontando la cascada artificial del río.

30. Cangas de Onís

Entre las imponentes montañas de los Picos de Europa y el río Sella, Cangas de Onís es la puerta asturiana a los Picos de Europa. Perfecto como campamento base, por su casco antiguo, una gran oferta de alojamientos, restaurantes y todo tipo de servicios. Declarado Pueblo Mágico 2021, tiene numerosos senderos para perderse por la montaña, verdes bosques, majestuosos lagos, ríos con aguas cristalinas, cuevas escondidas y por supuesto, los famosos quesos con denominación de origen.

Al llegar, lo primero que verás es el Puente Romano sobre el río Sella. Es de la época medieval, no romana y en cuyo centro cuelga la Cruz de la Victoria. Apenas cruzarlo se halla la Oficina de Turismo. Si continuas encontrarás la piscina municipal, un aparcamiento y el Instituto de Educación Secundaria, la Pista de Vóley y el campo de fútbol.

El casco antiguo concentra su actividad sobre la calle Pelayo. Cuenta con históricos edificios como la Casa de Soto o la Casa de la Capitana y la iglesia de la Asunción. También, encontrarás tiendas para comprar productos típicos y la plaza del Mercado. Allí podrás adquirir frutas, verduras, plantas medicinales, productos naturales, calzado, ropa, bolsos, carteras, navajas, cuchillos, embutidos y productos de la tierra. En lo que fue la iglesia de Santa María de Cangas (actualmente sin funcionar), el Aula del Reino de Asturias, y el túmulo funerario que se ubica dentro de la ermita de la Santa Cruz, de 6000 años de antigüedad. Para más información sobre este pueblo, puedes leer nuestra guía para visitar Cangas de Onís.

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Asturias es toda bella, a la hora de decidir cuales son los pueblos más bonitos, nunca podremos saberlo, porque como reza el viejo dicho. “sobre gustos no hay nada escrito”. En este caso, solo hemos descrito 30 de los hermosos pueblos, aldeas o parajes que se encuentran en el Parque Nacional de los Picos de Europa. ¿Cuál es tu preferido?